lunes, 16 de julio de 2012

La meada del liderazgo.


Todos los animales, de un modo u otro, delimitan y marcan su territorio; generalmente lo hacen mediante sus excrementos (orina y heces).


                    

El hombre primitivo pocas preocupaciones de espacio tenía. Había terreno para todos. Pero, a medida que crecía en número y desarrollo intelectual, fue extendiendo sus fronteras vitales.